lunes, 2 de diciembre de 2013

Ni voy a hablar de fútbol, dejen campeón vacante y a la mierda

Ah, lunes, el pináculo de la civilización occidental. Sin los lunes el capitalismo se iría al demonio y lo sabemos todos. Si no fuera por este día de miércoles, los viernes y sábados nadie tendría tanta necesidad de salir a cumplir sus deseos más básicos, para después quedarla los domingos comiendo ravioles, viendo fútbol y llorando el lunes por venir. Afortunadamente nada de eso me compete, porque para mí los lunes son el descanso del domingo y acabo de dormir 11 horas o algo así.
Muy bueno como se largó a llover dos minutos y de golpe todos los noticieros dicen "tornado". Otra que nieve en Buenos Aires, eso sí que no se ve por estos pagos. Por supuesto que internet me contradice: http://es.wikipedia.org/wiki/Tornados_de_Buenos_Aires_de_2012 A cualquier cosa le dicen tornado estos días. En mi época, que es la misma que "Twister", un tornado es un remolino gigante de viento que se coge todo lo que se encuentra, no una tormentita de morondanga que hubiese pasado sin pena ni gloria si no se hubiese inundado la mitad de la ciudad. Tengo perfectamente clara la contradicción.
No es la primera vez que Twister sale a relucir en mis textos. Debe ser una película mágica. O capaz es Helen Hunt, que ya demostró tener el superpoder de ser malísima actuando, no ser un minón y seguir consiguiendo trabajo.
Peneführer.

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