sábado, 23 de enero de 2016

Pánico y locura en Mar del Plata

Como sucediera otrora, Lectura de Baño se transmite hoy por un medio distinto conmemorando la pepa que me tomé hace unas horas. Por eso es que el post de hoy te llega en forma de avioncito de papel.

Un momento.

Ése no es el inspector de billeteras.

Ahora que le he dado todos mis documentos a un extraño, continúo mandando avioncitos con los desvaríos de un drogadicto. A muchas personas les parecerá cuanto menos polémico eso de andar admitiendo el consumo de drogas en un formato no sólo público, sino que unos cuantos de mis familiares afirman seguir fervientemente. Hunter S. Thompson hizo toda una carrera de eso de drogarse y escribir al respecto, aunque espero que a mí no me personifique Johnny Depp. Hoy dije ser Bruce Willis.

Ah, hoy sobreviví a un tornado! O al menos hubo uno por donde estoy y sigo vivo. Ni en pedo quiero que me actúe Bill Paxton igual. Y sé que nadie me sigue en ésta, pero aguante Helen Hunt.
Peneführer.

P.d.: fórmula del humor: referencia a drogas; chiste de los Simpsons; referencia a drogas; un montón de nombres propios; fin.

Acabo de darme cuenta que si tuviera que firmar algo como el Peneführer no tendría la menor idea de cómo. Un papelón; como mi cursiva, que probé haciendo firmas posibles y no uso nunca.



miércoles, 20 de enero de 2016

La ola que quería ser fernet

Estar en la costa sin internet, computadora o la menor intención de comprar un diario me deja en una situación comprometida en cuanto a la recepción de información sobre el estado del mundo y las andanzas de la Xypolitakis (una de las cuales está actuando ("actuando"*) acá, en frente de "El Polaco"). Sin embargo, no tardé ni un poco en enterarme de los reclamos gremiales de los trabajadores de Fratelli Branca (S.A.?) en lo que está próxima a ser conocida como la lucha obrera con menos apoyo popular de la historia. Porque esto no es como cuando la kretina salió a tocarle el bolsillo a un montón de ricachones con hectáreas y hectáreas y 4x4; no, acá son unos negros pobres jodiéndonos la capacidad de tomar un ferné con Coca y mucho yelo en el punto más arduo del verano. Alguien quiere pensar en los niños!?
También me llegó la campaña del miedo que los militontos de La Cámpora están haciendo sobre la " pena de muerte por decreto". Dejen de difamar al Señor Presidente Mauricio Macri, infames; nada más dijo que le tiren misilazos a los narcotraficantes, gente mala. Es por nuestra seguridad. Ustedes porque quieren drogas con su fernet.
Peneführer.

P.D.: eso sí, lo del Perro Presidente no lo entendi muy bien todavía.

* si viniste directamente a leer el asterisco ya ni te acordás de qué carajo estaba hablando antes del paréntesis.

lunes, 18 de enero de 2016

No culpes a la playa, culpá a los que la visitan

Lo más probable es que suba esto por celular, porque ahora que escribo muy espaciadamente no avisé que por alguna cantidad de días me encuentro en "the happy". La casa en cuestión carece de computadora, wifi o inquilinos civilizados, pero ahora soy una chica del 2000, sin mariposas ni ositos y con un celular con internet. Por supuesto que para usar mi celular del nuevo milenio tengo que competir por adaptadores para el cargador.
 Esta manía por escribir boludeces graciosas comenzó como hoy: a mano en Mar del Plata. En aquella ocasion, tenía que comunicarle a los 17 drogadictos que paraban conmigo que me iba a buscar café mucho antes que ellos se despertaran, por si me raptaban de camino y me transformaban en la putita de las inferiores de Aldosivi. En esta ocasión, el equipo en cuestión es Excursionistas, cuyos ex jugadores de reserva están haciendo un asado en la casa en que yo habito. Y a mí y al amigo que me invitó, primo de uno de estos sujeto-deportistas , no nos contaron para la ingesta de carne y vino. Antes creía que eran unos chetos putos, pero no malos tipos. Cómo se puede ser tan desalmado? No te digo que no se lo haría a mi peor enemigo porque ni en pedo te comparto un asado con mi peor enemigo, pero no se hace.
Para colmo, ya que no nos sentíamos bienvenidos fuimos a una plaza y un adolescente me pintó la cara en un manou a manou de basquet. Sólo cosas malas suceden en la feliz.
Peneführer.

miércoles, 13 de enero de 2016

Diptongo Narcoléptico Urbanizable, pte 2

Meros minutos después de publicar el post anterior, descubro que el wasap no tiene signos de exclamación e interrogación de apertura. Todo muy lindo con que es un invento de habla inglesa, pero se supone que está localizado y la RAE no debiera soportar tamaño insulto. Es un escupitajo en el ojo de los grandes literatos de habla hispana, que desde que viven de regalías se radicaron en Miami.
Por supuesto que lo descubro porque ahora tengo un "teléfono inteligente". Tan inteligente que no le alcanza el diccionario para complacer mis necesidades lingüísticas. Que a veces, pero no siempre, son las mismas que las sexuales.
Peneführer.

martes, 12 de enero de 2016

Digiera Nuestro Upite

Hoy me criticaron que hace mucho no escribía. Evidentemente no pueden vivir sin su dosis diaria (ja, diaria) de Peneführer.
Igual es cierto que desde el año pasado que no escribo nada. Un papelón. No, pará (aguantehaaaaaá), esa es una palabra re del dos mil quince. El dos mil dieciséis usamos palabras más cool, como abyecto u afrentoso. El bochorno que está haciendo pasar este Peneführer al gran nombre de los Peneführers del Oeste, soberanos de las Bellas Artes y el Matambrito a la Pizza; merece morir en la ignominia. Otra palabra cool del año entrante, asegurate de enseñársela a todos tus amigos.
Han pasado las fiestas. Casi que pareciera de otra época esa semana maravillosa entre navidad y fin de año en la que creo no haber hecho otra cosa que beber. No que haya hecho muchas cosas más en lo que va del corriente, pero es como que "ya casi me voy de vacaciones". Pasa que Mauri se las apaña para que parezca que van mucho más que doce días de morondanga de los trescientos sesenta y seis, durante los que no pisó su reluciente oficina presidencial. Imaginen si resulta que "lo despiden" porque no va nunca a trabajar. Digo, ¿no era que volvían los tres meses de período de prueba?
Peneführer.

P.D.: no creo que pegue la de escribir los números en el dos mil dieciséis.