martes, 26 de abril de 2016

Estudio sobre la relación entre la fama, el abuso de sustancias y el de menores

¿Qué tienen en común Michael Jackson, Ciro Pertusi y José Miguel del Pópolo? Seguro que no el rock.
Es un dato científico que existe una relación proporcional entre la fama y los escándalos sexuales. También es un dato que los famosos consumen drogas. ¿Cuál es entonces la relación entre la fama, las drogas y los abusos sexuales? Gracias a un extensivo trabajo de campo consumiendo drogas y violando menores, podemos asegurar que a los famosos les gusta drogarse y tienen fantasías sexuales. Éste es un evidente avance de los estudios previos que insistían en que las estrellas eran dioses terrenales con costumbres deídicas y no debían ser cuestionados por meros mortales (ver Lévi-Strauss, C., Antropología hollywoodense, 1996).
Es imperioso poner en la balanza entonces que los sujetos que gozan de la fama tienen impulsos sexuales, como cualquier otro, y tienen vicios, como cualquier otro. Ésto nos permite aceverar que, en efecto, los sujetos famosos son como cualquier otro. ¿Qué es entonces lo que hace la fama que transforma a estos seres ordinarios en bestias salvajes que abusan sexualmente de otros?
Pensémoslo desde otro punto de vista. El sujeto que comete crímenes sexuales, es procesado y se vuelve parte de un juicio de índole mediático, ¿es un sujeto que acarrea el gen de la fama y simplemente incursionó en el asunto en el orden equivocado? Expertos en genética así lo aseguran. "El gen de la fama puede estar durmiente toda la vida, pero sus efectos secundarios se hacen presentes de todas maneras" afirma el doctor Childtouch. "No es culpa de los famosos abusar sexualmente de otros; la sociedad debe aceptar que algunos tenemos... ejem, tienen impulsos incontrolables".
Es evidente entonces que no se puede estar a salvo alrededor de las estrellas, especialmente los bloggers. ¿Pero, se preguntará usted, cómo se relaciona ésto con, por ejemplo, los chicos muertos en la fiesta Time Warp por consumir unas pastillas malas y no tener acceso a agua potable? Ahora esos chicos son famosos. ¿Están sus hijos a salvo de ellos?
Peneführer, doctor en la Universidad del Chiste "Guillermo Lafarrel".

lunes, 18 de abril de 2016

Con aceite de oliva y queso rayado

Si hay algo nefasto de venirse a vivir al límite del campo, o sea cualquier lugar al que no llegue el subte, es que el fanatismo religioso va en aumento. En Palermo a nadie le importa a qué Dios le rezás para encontrar un lugar para estacionar, pero acá en los suburbios de Floresta me despiertan con una regularidad asombrosa para tener unas charlitas sobre el "Señor". Lo que me pregunto en ésta la vez número 47 que sucede es después de las primeras diez veces que la dulce vieja hija de puta pasó, tocó todos los timbres de la cuadra y fue mandada a la mierda con variados grados de amabilidad, ¿qué la motiva a seguir pasando? Obviamente que una pasión religiosa, pero ¿qué espera? ¿Que de golpe un domingo a las 10 de la mañana, completamente borracho, me surja el sentimiento religioso? A menos que empiece a anunciarse como "traigo la palabra del Señor, un remedio para la resaca y un plato de ravioles" no veo que su suerte vaya a cambiar.
Parece que en Brasil son todos tan hombres del Señor que bajan presidentes en su nombre. ¿Cuántos de esos sujetos tendrán cuentas offshore? Eso no es lo que verdaderamente me pregunto; ¿cuántos de esos sujetos practicarán BDSM? Cuando se empiece a hablar de cosas serias me interesaré en la política.
Peneführer.

jueves, 14 de abril de 2016

Qué buen gobierno el de Larreta, que nadie habla de él

¿A quién se le ocurrió que "patear el tablero" era una buena metáfora de cambiar la cara y empezar de nuevo? En mi experiencia, a la gente que patea el tablero a mitad del juego se la cambian a patadas. Mínimo va a tener que cambiar de amigos.
Hablando de patear gente, imagino que ya a esta altura todos vieron al maestro senegalés. Por si las dudas, veámoslo una vez más. Y otra y otra, porque aguante los gifs.


Un súper hombre el senegalés, que capaz es congoleño, pero para los argentinos Senegal es a los negros lo que China a los asiáticos. Igual me imagino que ese chabón fue deportado poco después de este incidente, no sin una buena cagada a palos en la comisaría previamente. Pero a vos qué te importa, si tenés tu meme del negro que revolea policías y la semana que viene vas a tener cualquier otro y nunca más te vas a preguntar por la vida del senegalés que vendía relojes en Avellaneda y que ahora está muerto de disentería en las afueras de Tambacounda, Senegal. O vendiendo relojes en Sarandí, no importa; el punto es que tendrías que averiguar sobre su vida y construírle una estatua. Lo haría yo, pero estoy sumamente ocupado escondiendo mis cuentas offshore.
Peneführer.

martes, 12 de abril de 2016

It's karma, bitch

"Cosas malas le suceden a la gente buena" me repiten una y otra vez, pero a pesar de todo el esfuerzo que hago por no entrar en esa categoría malas cosas me siguen sucediendo. Por ejemplo, ayer a un rompecabezas se le dio por faltarle una pieza y no ofrecerme la sensación de logro que debiera. También, mi casa necesita arreglos; ¡arreglos! Y para colmo, Macri es presidente. Es como si el universo me la tuviera jurada a mí en particular.
Pero acá seguimos desde la producción de Lectura de Baño, resistiendo con aguante. Como en todos los otros usos de la categoría 'aguante', es una metáfora sobre el consumo de alcohol y drogas, el empleo de cánticos rivalizadores y con variados grados de sexismo, racismo y xenofobia, y la práctica de actos violentos. Todos aquí en la redacción apoyamos el uso y abuso del aguante como moneda de cambio para lograr objetivos superadores, como evitar la encarcelación de Cristina, reclamar una reducción en el impuesto al fernet o simplemente satisfacer las ganas de golpear (ser golpeado por) policías.
Peneführer.