Creo que me voy a hacer hincha de River. ¿Messiquién? No, yo quiero la camiseta de Álvarez Balanta.
El otro día encontré otra variante facebookeana de la cura contra el cáncer, ésta vez con vacuna y todo. Como soy un sujeto responsable en mi repartija de información (no como todos los otros informativos), busco al supuesto médico responsable: está muerto desde mayo. ¿A vos te parece que un muerto puede encontrar la cura contra el cáncer? No más que un niño sin brazos. Menos, me atrevería a asegurar con absoluta confianza. ¿Puede un segundo científico usar la investigación del difunto de base y lograr grandes avances? Mucho más que el niño sin brazos, seguramente. Pero el muerto va a seguir muerto.
En relación al chiste, ayer vi "The drop", una película que no le recomendaría ni a mis más ferreos rivales. Y es por eso mismo que se la recomiendo a todos (y todas) los veganos que me lean. No por el hecho de ser veganos, sino porque la mayoría de los veganos son pro-"derechos de los animales" y la película incurre en algo que todos tienen muy claro: es difícil manejarse en esta sociedad mugrienta sin ser un amante de los animales. También incurre en ser un pésimo policial, pero la clave de todo es un perro. Ustedes ven una mina con un perrito en la cartera arriba del bondi y piensan "ay, qué lindo"; yo pienso "dame una excusa para hacerte echar del bondi, dueña de perro sin consideración por tus prójimos". Es muy tentador en esa situación echarle la culpa al perro, pero no es su culpa estar arriba de un colectivo. Él seguramente preferiría estar en una plaza. O un bosque. O el paraíso de las cosas mordibles. Pero no, está adentro de una cartera. Y dicen que yo no tengo consideración por los animales.
Peneführer.
P.D.: mejor en un guiso que una cartera.
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