Qué divertidos los viajes en grupo al "conurbano profundo". Sobre todo porque suelen implicar ir a un lugar con pileta (porque allá en el deep conurban todas las casas tienen pileta salvo las de los pobres, pero a los pobres no los vamos a visitar), pero también por la aventura de un viaje en tren a lugares como Big Monte, Isidro Newhouse o Good View. Lo único extraño de la aventura es que pase lo que pase con tus compañeros tenés que volver con ellos; ¿qué carajo hacés sino en el medio de Longchamps?
Allí en Big Monte fue que estuve el domingo, mismísimo día que había escrito al respecto, y vi (en la pileta, por supuesto) mi primer palo de selfie. El destino me lo tenía reservado. Desafortunadamente estaba en posesión de menores de edad, por lo que me pareció un poco desubicado quedarme mirando ojetes. Destino hijo de puta.
¿Sabías que las cucas son como las tortugas en relación a darse vuelta? Acabo de ver una agonizando mientras intentaba darse la vuelta y entendí por qué todo el tiempo me aparecen cucas muertas de espalda por toda la casa. El único misterio ahora es cómo carajo un bicho que puede caminar por las paredes y en ocasiones volar puede caer de espaldas.
Peneführer.
P.D.: internet me asegura que sí saben darse vuelta, pero a las pruebas me remito. Ni que internet tuviera todas las respuestas.
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