Como ya he expresado rotundamente -tengo muy claro que soy repetitivo- odio leer diarios y ver noticieros. No porque ser un bruto ignorante me entretenga (aunque es innegable que es más entretenido que ser un intelectual que entiende el concepto de angustia existencial), sino porque siempre son una sarta de pelotudeces enganchadas por el morbo. Pero últimamente facebook me está haciendo la vida mucho más fácil: cada vez que sucede algo importante me llegan las diferentes versiones según mis "amigos de La Cámpora" o según mis "no tan amigos fachos". Pero especialmente, gracias a facebook es impósible no enterarse de una muerte de famoso. Innegable que Paco de Lucía recibió mucha más atención que Harold Ramis, que es infinitamente más capo, pero lo atribuyo a que mis amigos suelen ser músicos y no capos del humor.
Todos los chistes que tenía después de eso fueron desplazados porque, después de abrir La Nación para usarlo de disparador cómico (ejercicio altamente recomendado), me crucé con la noticia de que un chabón había hecho un corazón con una impresora 3D. Igual al final no es que con una impresora 3D se pueden hacer órganos humanos funcionales, pero hubo un breve momento en el que consideré vender mi casa para comprar una y crear mis propias abominaciones.
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Una vez más, me rehúso a seguir haciendo chistes cuando hay gente a la que le pagan por no hacerlos y los hace igual: http://www.lanacion.com.ar/m1/1667836-durisima-nota-sobre-la-argentina-y-el-peronismo-en-the-new-york-times (highlight: "obsesionados con una pequeña guerra perdida", de parte de un yanki).
Peneführer.
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