domingo, 5 de julio de 2015

¡Tórax gélido!

Hay un concepto que hay que erradicar prontamente del mundo: que alguien no sepa hacer algo no quiere decir que no lo pueda apreciar y, por lo tanto, analizar y criticar. No estoy hablando de la dialéctica de Hegel, que ni manejo ni me interesa, sino del fútbol. Es un lugar común en días tristes como éste la frase "vos no sabés jugar, ¿qué hablás[, gil]?". No, no sé jugar al fútbol. Soy lo que se conoce habitualmente como un caballo. Eso no quiere decir que no pueda apreciar, comprender, y por tanto analizar y criticar la actuación de Messi el día de ayer. ¿Es Messi un pecho frío? Y, hay veces que sí. Hay jugadores a los que quiero muchísimo más que a él, como el Poroto Cubero, que a veces juegan mal y reciben las puteadas acordes. Porque la frase "Messi, la puta que te parió, pasate a tres y clavala al ángulo", si la analizáramos acorde a los fundamentos que Hegel quizás plantea, implica que uno sabe que Messi es capaz de pasar a tres y clavarla al ángulo, cosa que yo no, porque es indiscutiblemente uno de los mejores jugadores de la historia, y entonces está exigiéndole que haga en su mejor versión lo que mejor sabe hacer, como se le exige a todos los artistas (sin duda que Messi es eso, un artista). Es lo mismo que gritar "Charly, la puta que te parió, dejá la droga y tocá bien"; yo no puedo tocar el piano o cantar como Charly García, pero eso no quiere decir que no aprecie cuando lo hace bien y desprecie cuando está pasado, se olvida las letras, golpea las teclas sin sentido y se va a los tres temas. ¿Es Charly García un pecho frío? Y, hay veces que sí. ¿Es el Poroto Cubero un pecho frío? No, nunca, pero eso no necesariamente implica que debiera ser el cuatro de la selección o que sepa tocar el piano.
Peneführer.

P.D.: ¿es el Peneführer un pecho frío? Jamás, pero no se atrevería a disputarle el puesto a Marcos Rojo.

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